QUÉ DECIMOS CUANDO DECIMOS CULTURA?

En los últimos meses, y podríamos decir que en el último año también, escuchamos mucho la expresión “dar la batalla cultural”. De hecho, si hilamos fino, hemos escuchado mucho que Milei o lxs libertarixs ganaron la batalla cultural y allí radica la amplia victoria de ese espacio en las últimas elecciones. 

 

Eso nos lleva a preguntarnos ¿qué es la cultura? La Real Academia Española lo define como “Conjunto de conocimientos que permite a alguien desarrollar su juicio crítico.”, mientras que Batalla Cultural se puede definir como el conflicto ideológico entre grupos sociales y la lucha por el dominio de sus valores, creencias y prácticas.1 

 

A raíz de la presentación de la “Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” nos parece necesario reflexionar sobre la Cultura en un general. 

 28/12/2023 

Además de lo general, como el intento de la delegación de facultades legislativas al Poder Ejecutivo Nacional, y la lesión de los derechos colectivos en cuanto a que podamos reunirnos en una plaza libremente, también existen los reclamos de cada sector como lxs farmacéuticos, lxs trabajadores, lxs jubiladxs, la salud, la salud mental, la educación, la ciencia y la tecnología, el Turismo, las PyMeS y, entre muchas otras, la cultura. 

 

¿Por qué decimos que la Ley Ómnibus afecta a la cultura argentina?

 

Porque dentro de muchas otras modificaciones, derogaciones y otros artilugios, deroga la Ley de Precio Único del Libro, reforma - desfinanciación - el Instituto Nacional de la Música (INAMU),

Esto es una realidad, sin importar si los gobiernos fueran de un color o de otro, hay una subestimación y minimización de las escenas culturales. Pero habían algunas cosas que estaban bien y que, de alguna manera, deberían haber sido la piedra angular para el cambio, la base para mejorar las cosas. Esas bases eran: las fiestas nacionales, los fondos para la cultura y las artes, y los institutos nacionales de cada rama artística.

 

Esto no puede pasar, no podemos permitir que un Presidente crea que tiene impunidad porque el 56% lo votó en un ballotage y que, a partir de ese número, justifique las decisiones antidemocráticas e ignore las instituciones democráticas que nuestro pueblo recuperó pagándolas con sangre. 

 

Destruir la Cultura Argentina no trae ningún beneficio para la sociedad, destruir las políticas públicas

públicas que nos permiten poder disfrutar del arte argentino, que le permiten a lxs artistas argentinxs poder mostrar su arte y, en muchos casos, poder vivir de eso, nos perjudica a cada argentinx. 

 

Las salas independientes de teatro, que muchas veces alojan los espectáculos más accesibles, se sostienen en parte con el INT, la mayoría de las películas argentinas que vemos son gracias al INCAA, mantenemos el nivel de arte audiovisual en nuestro país gracias al ENERC, muchos cuadros, elencos, crews, pueden lograr sus objetivos con el Fondo Nacional de las Artes, muchos discos que has escuchado y de bandas locales, se han grabado gracias al financiamiento del INAMU. Lo que quiero decir es que estas políticas públicas pretenden facilitar la federalización del arte, y ese espíritu federal es el que alimenta y desarrolla nuestro juicio crítico. Así como también brindan acceso al entretenimiento, el ocio y el disfrute. Este proyecto de ley, además convertirá al arte y la cultura en negocios para unos pocos, y atenta directamente con todo lo mencionado anteriormente. 

 

Nos quieren adormecidxs, promueven que los canales de expresión no digan lo que saben que van a decir, que el arte, que la cultura y sus trabajadoxs no cuestionen nada. 

 

Ojalá que, a quienes buscan apagar la cultura, se le responda con más convicción, más unidad, más rebeldía y más organización, y así poder defender lo conquistado. 

 

La cultura es nuestra, el arte es nuestro, de la sociedad toda, la cultura y el arte no son un gasto, es una inversión para elevarnos como pueblo, para construir memoria, para ser críticxs y que las producciones sean de libre acceso.

 

AUTORA

Pamela Klimisch

Habiendo definido un poco esto, me permito ser un poco tendenciosa y preguntarme ¿qué lugar ocupa el arte en la Cultura? Quizá la respuesta a este interrogante nos hace ver la cultura de una manera más sesgada, pero que empieza a tener una connotación que, por lo menos para mí, me parece interesante: El arte representa el canal de expresión de toda cultura. Es decir que, en primera instancia, el Arte tiene una relevancia objetiva en la cultura de una sociedad. 

 

Mientras todxs estamos pendientes de lo que pasa con el Mega DNU, con esta Ley presentada (que incluye, extrañamente, el Decreto antes mencionado), con las medidas que el Ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, anunció en la primera semana del gobierno, que si la CGT llamaba o no llamaba al paro, la batalla cultural de repente se empieza a dar en muchos ámbitos al mismo tiempo. 

 

(INAMU), elimina el Instituto Nacional del Teatro (INT) y el Fondo Nacional de las Artes (FNA), desfinancia y limita al Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) y, por último, desaparece la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (ENERC). 

 

Además de la decisión de degradar el Ministerio de Cultura de la Nación a Secretaría dentro de la Jefatura de Gabinete. No se encuentra en el proyecto de Ley pero sí es parte de la reforma del estado que también quita derechos adquiridos para la cultura de toda la población.

 

Es también necesario un sinceramiento. Como gestora y productora trabajé mucho tiempo en el ámbito cultural mendocino, también he tenido la suerte de conocer la realidad cultural de otras provincias de nuestro país, y hay algo que la mayoría comparte: las escenas culturales dependen en un 80% de la autogestión, la unidad entre lxs artistas y las ganas de salir adelante, y solo en un 20% dependen de la gestión estatal. Esto, claramente, no es una elección de las escenas culturales en su conjunto, sino el resultado de la falta de políticas públicas, sobre todo provinciales y municipales, que propendan a apoyar a lxs artistas de cada lugar.

 

1 La expresión «guerra cultural» es un calco del alemán Kulturkampf. La palabra alemana Kulturkampf (lucha cultural) se refiere al enfrentamiento entre grupos culturales y religiosos en la campaña de 1871 a 1878 del canciller Otto von Bismarck del Imperio alemán contra la influencia de la Iglesia católica.